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  fotos Alfonso García

 










fotos Alfonso García

La semana santa de Sevilla tiene una importancia histórica, religiosa, social, cultural y vital para la ciudad.  Entre las muchas cosas dond...












La semana santa de Sevilla tiene una importancia histórica, religiosa, social, cultural y vital para la ciudad. 

Entre las muchas cosas donde se puede demostrar tal afirmación está su callejero, es decir las numerosas calles que tienen su nombre dedicado a diferentes elementos que componen y configuran la manifestación religiosa.

En primer lugar se encuentran las calles dedicadas a titulares de las diferentes hermandades o al nombre de la hermandad propiamente. Después tenemos las dedicadas a personas relacionadas con las diferentes artes que participan en dicha celebración, escultores, orfebres, bordadores, tallistas, músicos, compositores, cantaores de saetas y en el arte del martillo (capataces).

También existen calles dedicadas a personas que han destacado en el ámbito de la literatura, por sus escritos y libros dedicados al estudio y exaltación de la semana santa, así como famosos pregoneros de la misma.

Existe otro aspecto en el callejero cofrade, es el referido a personas del clero, sacerdotes, obispos y cardenales que tuvieron una participación decisiva a lo largo de la historia en la fundación de hermandades, creación de cultos y concesiones de coronaciones canónicas.

Por último están las placas, situadas en las calles y plazas que nos hacen recordar alguna circunstancia o suceso importante relacionado con la semana santa.

Como dice el dicho “No están todos los que son, pero si son todos los que están”.

Reportaje realizado por Alfonso García.


Es tiempo de afinar de y preparar los instrumentos mediante los ensayos y conciertos populares para que cuando lleguen los días señalado...


Es tiempo de afinar de y preparar los instrumentos mediante los ensayos y conciertos populares para que cuando lleguen los días señalados esté todo a punto, así como también el tiempo de las "igualás" de los pasos para comenzar con los ensayos de cara a la Semana Santa.

Cornetas y tambores, bandas de música, agrupaciones musicales, y el clasiquísimo que no se puede perder de las capillas musicales, todos ellos ponen a punto interpretaciones de marchas como Amarguras, "La Madrugá"  y un sinfín de sones que deleitarán a los cofrades y que le darán el son a nuestros pasos y procesiones.



. Detalle de un músico de la Banda de "los Coloraos"de Daimiel, Ciudad Real

Tiempos de cofradías, que no de hermandades. Pasaron esos tiempos en los que se recolectaban los pocas revistas de semana santa que c...



Tiempos de cofradías, que no de hermandades. Pasaron esos tiempos en los que se recolectaban los pocas revistas de semana santa que circulaban y salían a la luz, cuando un concierto era un acontecimiento memorable. Cuando miraban con extrañeza a un fotógrafo por llevar un trípode. Tiempos de extraordinarias, verdaderamente extraordinarias.

Tiempos memorables cuando un aspirante a presidir una Cofradía no necesitaba hacer campaña electoral. No todo lo antiguo es bueno y lo moderno es malo, pero hemos perdido esa conciencia de grupo, de hermandad, que teníamos y que ahora se ha transformado al compás de esta sociedad desnaturalizada.

Trataremos de apoyarnos en los momentos que nos queden, en el trabajo de los artesanos, de las bandas, de los floristas, de los bordadores,..., de todas esas personas que ponen el corazón en lo que hacen. Y en los momentos que nos pinchen en el corazón detrás de un paso al son de una marcha. Voy a hibernar que llega el frio al alma.

Foto SMCE La ilusión es ese sentimiento de esperanza que genera en nuestros adentros la enorme sensación de vivir aquello que se d...

Foto SMCE


La ilusión es ese sentimiento de esperanza que genera en nuestros adentros la enorme sensación de vivir aquello que se desea. El hombre desde su infancia vive momentos ilusionantes con los que soñó, sueña y seguirá soñando, pues es la ilusión ese motor que nos ayuda a vivir cada día con una sonrisa.

Los previos de una boda para la novia en el día mas importante de su vida, el partido esperado cuando se ha llegado a la final de una competición, los previos de la paternidad, esa visita del ser querido que tienes lejos, entre otras situaciones, son ejemplos de ilusión en la vida cotidiana de cualquier ser.

Pero el mejor ejemplo de ilusión, quedaba reflejado en el rostro de los niños en estos días que han pasado, pues con ilusión esperaban la llegada de los Reyes Magos de Oriente, soñando que entraran en sus casas para dejarles aquellos regalos que en el principio del periodo de Navidad quedaron manuscritos en esa carta que todos alguna vez hemos escrito, y que en nuestro interior de alguna manera u otra seguimos escribiendo.

La ilusión comienza ahora en lo cofrade, contando los días restantes para que llegue lo que tanto ansiamos, la ilusión nos hará niños sonrientes a la espera de lo que esta por llegar, que no es otra cosa que el sentimiento de una nueva Semana Santa.

Recordando Semanas Santas pasadas, no recuero la primera vez que vestí el habito nazareno. Recuerdo perfectamente, como si de ayer se tratara, la preparación de la túnica, mi madre cosiendo el dobladillo, los guantes preparados junto a los cordones,  recuerdo perfectamente mi ilusión.

La ilusión también me hace recordar la primera vez que fui en el varal de un trono, demostrando hombría en unos cuerpos que quizás aun no eran de hombres.

Todo lo recuerdo con ilusión, porque la ilusión no acaba. La ilusión no entiende de edades, la ilusión entiende de sentimiento, el sentimiento de vivir lo soñado, y lo soñado esta cerca. Sueñen, pues cada vez falta menos. Os dejo soñando con una nueva Semana Santa, una Semana Santa que un año mas nos regalara momentos inolvidables, momentos llenos de ilusión, pues la ilusión no acaba.

El que es cofrade posee en su alma cofradiera multitud de vivencias de la Semana Santa guardadas en lo mas hondo de su ser. No es cues...


El que es cofrade posee en su alma cofradiera multitud de vivencias de la Semana Santa guardadas en lo mas hondo de su ser. No es cuestión de que me ponga a contar aquí las mías, sino más bien haceos pensar y reflexionar sobre toda esa infinidad de momentos y situaciones que habéis vivido al lado de vuestros sagrados titulares con la túnica puesta.

La Semana Santa nos sorprende, en lugares inesperados, en momentos inverosímiles, con personajes anónimos a veces. 

Todos guardamos para siempre historias sin apellidos, pero que se han forjado en el fuego inextinguible de nuestras creencias.

SMCE

Detalle del Besamanos de la Virgen de la Merced, Córdoba Algunas hermandades han de tomar cartas en el asunto de los fotógrafos. En ...

Detalle del Besamanos de la Virgen de la Merced, Córdoba

Algunas hermandades han de tomar cartas en el asunto de los fotógrafos. En demasiadas ocasiones un elevado número de personas con diversos tipos de cámaras se suceden casi ininterrumpidamente en ciertos besamanos y besapiés. Van simplemente a fotografiar a las imágenes una y mil veces. No está mal, pero entorpecen a los que acuden para rezar. ¿Conocen el simbolismo profundo de lo retenido en sus cámaras? ¿Saben que no están en un museo donde, precisamente, no podrían hacer fotos? Es un síntoma más de la necesidad de rectificar el rumbo y de hacer valer el significado de las sagradas imágenes que representan a Cristo y a María para sostener la devoción de la que se nutren nuestras Cofradías. SMCE

“El Capirotero” es un adjetivo peyorativo que los capillitas aplican a muchas personas. Al capirotero le encanta la Semana Santa, es h...



“El Capirotero” es un adjetivo peyorativo que los capillitas aplican a muchas personas. Al capirotero le encanta la Semana Santa, es hermano de varias hermandades, pero no se pasa por éstas para nada, si exceptuamos frecuentes visitas solitarias a los titulares.

No están pendiente de los mil detalles de la Semana Santa, ni de sus noticias o rumores. Les gusta la Semana Santa, les encanta y lo hacen como meros espectadores o como la gran mayoría de los ciudadanos, desde fuera.

La idea de que los hermanos de una Hermandad se dividen entre los que participan en ésta y los “capiroteros”, los que sólo van para el día de la procesión. La escasa presencia en el día a día de los “capiroteros” garantiza el -a veces- sistema cerrado de gestión de estas entidades y su poca democratización en algunos casos. Si no fuera por las cuotas y las papeletas de sitio pagadas por los “capiroteros” los demás no tendrían fondos suficientes para tener proyectos y tener una representación de más personas que la de sus individualidades.

Muchas personas pasan por un sitio, pero sólo unos pocos ven una imagen digna de ser captada. La fotografía consiste en saber capturar ...


Muchas personas pasan por un sitio, pero sólo unos pocos ven una imagen digna de ser captada. La fotografía consiste en saber capturar una imagen que otros ni siquiera ven. Aunque cada vez más la fotografía es «Photoshop».

Una muestra visual de aquello que no se ve, que carece de ojos para muchos y resulta ser el trabajo de todo un año de cara a esta tan señala fecha. El otro lado no-visible de la Semana Santa, de aquellos que dedican su tiempo a este caso y que mantiene a muchas familias para llegar a final de mes en muchos casos.

Uno de los acicates que bajo mi punto de vista, más estimulan al cofrade "auténtico" ante la Semana Santa es, sin duda, el...



Uno de los acicates que bajo mi punto de vista, más estimulan al cofrade "auténtico" ante la Semana Santa es, sin duda, el hecho de vestir la túnica de nazareno. Hace tiempo escribí que donde mejor se veían las cofradías era desde el interior de un antifaz y a través de los ojales. Alguien me señaló otro sitio mejor que yo no he podido experimentar; desde dentro de la celosía de un respiradero. Es muy posible que así sea si se considera que el costalerismo crea adición: la mayoría de los que una vez se arrodillaron en el suelo para hacerse la ropa y, erguidos ya se ajustaron la visera en la frente al borde mismo de las cejas cual la torería usa una montera, lo han repetido todos los años mientras "el cuepo aguante".

Pero os aseguro que también crea adición vestir la túnica. Con túnica procesionaban ya nuestros remotos antepasados, y así se viene sucediendo de generación en generación, muchas veces con el rito añadido de heredar una túnica como única herencia.

SMCE


Paso de Palio de la Virgen de la Amargura, Sevilla 2019 Domingo de Ramos


Paso de Palio de la Virgen de la Amargura, Sevilla 2019 Domingo de Ramos

De pronto, filas de nazarenos, divididos en tramos toman la calle, no ves ni su principio ni su final. Es fascinante el mar de capirotes ...

De pronto, filas de nazarenos, divididos en tramos toman la calle, no ves ni su principio ni su final. Es fascinante el mar de capirotes en el que navega la cofradía. El paso, que a lo lejos empieza a verse con un ruido intenso pero lejano, mezclado por el bullicio de la gente. Se acerca y el silencio, de nuevo se va haciendo.

Foto:SMCE LUNES SANTO SEVILLA 2019 HDAD DE SAN GONZALO

Escribía Antonio Burgos que ya sabía por qué a la salida de una cofradía se la llama "estación de penitencia" y es por la ...



Escribía Antonio Burgos que ya sabía por qué a la salida de una cofradía se la llama "estación de penitencia" y es por la que hacen los que salen en la procesión, al no poder ver a su Cristo y a su Virgen, durante todo el recorrido, no sólo por lo alejados que puedan estar del paso, sino porque, incluso los cercanos, saben que en las paradas no deben mirar hacia atrás. Estoy de acuerdo con el maestro, pero voy a ir un poco más allá. Los cofrades no hacen penitencia cuando su cofradía cumple la estación; cuando hacen penitencia es si, por lluvia, se suspende la estación. No hace falta que esto que digo se lo confirmen los cofrades: basta que usted observe sus rostros de felicidad a la recogida, cumplida la estación; los abrazos y besos que se prodigan, las enhorabuenas que se dan, y esto es válido incluso para los que hicieron el mayor esfuerzo físico, como los que cargaron el misterio o el palio o portaron las insignias más pesadas. En cambio, si se anuncia la suspensión de la salida, pocos contienen las lágrimas y nadie se alegra.

Y esta penitencia, no saliendo, la hacen los cofrades, casi todos los años ¿Se ha preguntado usted cuántos años hace que no tenemos una Semana Santa en la que la lluvia no impida alguna salida procesional? Pero para esta penitencia, que nos viene del cielo, no hay reglas. Por ejemplo los años que la Semana Santa caía en marzo, nos las prometíamos felices porque, según nosotros, cuando llueve en Semana Santa es si cae en abril, porque el refrán de las aguas mil y la experiencia así lo dicen. Aunque no suele ser así siempre.

¿Significa esto una muestra de desaprobación del cielo con las cofradías y sus manifestaciones externas de culto? Yo estoy seguro de que no. Lo más que concedo es que, viendo lo que disfrutamos los cofrades en una salida procesional acompañando a nuestros titulares, nos envíen de cuando en cuando la penitencia de no tener ese disfrute. Pero si la Virgen María hizo el milagro de que nevara en Roma en el mes de agosto, ¿no podría la Señora darnos un año una Semana Santa sin agua?

No tengo el menor ánimo de crear polémica, pero creo que es bueno ser un poco autocríticos con nosotros mismos, para mejorar lo mejorable...

No tengo el menor ánimo de crear polémica, pero creo que es bueno ser un poco autocríticos con nosotros mismos, para mejorar lo mejorable y para corregir las desviaciones en las que en ocasiones incurrimos, con toda la buena fe, pero que dañan las pequeñas cosas, los pequeños detalles que hacen grande a nuestras hermandades, a nuestras tradiciones.


Una hermandad sin autocrítica está condenada al fracaso. Sucede que está autocrítica habitualmente brilla por su ausencia en el universo cofrade en el que de un modo u otro nos hallamos inmersos. Estamos habituados a la autocomplacencia, a comprobar cómo los dirigentes cofrades se envuelven en nubes de incienso y no quieren ver una realidad que muchas veces clama al cielo.

No digo nombres ni señalo a nadie, quien me conoce ya sabe de quien hablo. Lo malo de todo es que este tipo de juntas directivas son las "que convienen", las que dan poco ruido, y calientan poco la cabeza a los pastores del rebaño. !Así nos va!.

SMCE


Como un suspiro. Así llegó, y así se fue. Sujeta al estricto e inalterable contador del tiempo, la Semana Santa expone cada año su natura...

Como un suspiro. Así llegó, y así se fue. Sujeta al estricto e inalterable contador del tiempo, la Semana Santa expone cada año su naturaleza en la medida exacta que le ha sido otorgada. Desde la extraordinaria invitación que emiten los nazarenos de la "Borriquilla" el Domingo de Ramos abre los corazones, y hasta que ocho días más tarde el desenlace se funde en los besos cargados de sentimiento y nostalgia a los pies del Resucitado por la mañana, y templos llenos de pasos con la cera gastada. El álbum que almacena los recuerdos personales se ha compuesto de nuevas postales con la evidente intención de mitigar la nueva espera.

De este modo, a partir de hoy multitud de análisis tratarán de recoger lo acontecido. Como quien no acepta los designios del destino, las sucesivas alusiones al recuerdo exprimirán un invento que cada vez tiene más de artificial y menos de consustancial. Las observaciones cubrirán absolutamente todo lo materialmente vivido, sin embargo olvidarán a las personas, aquellas con las que compartimos instantes que por mucho esfuerzo que se ponga en recuperar jamás volverán a ser iguales porque ya forman parte del riguroso pasado.

Y qué nos queda, ¿un aura de tristeza tal vez? No, si hemos puesto interés en comprender la intensidad de estos días habremos caído en la cuenta de que el arrebato de matices no se ha producido en balde. La Resurrección colma con creces cualquier atisbo de soledad.


Los que me conocen bien saben la forma en que me gusta salir de nazareno y que si una cosa he aprendido de Sevilla es a salir d...




Los que me conocen bien saben la forma en que me gusta salir de nazareno y que si una cosa he aprendido de Sevilla es a salir de penitente. Nada del "postureo" de ir con la túnica y sin cubrir con el capirucho, mucho menos hacerme fotos destapado. De un tiempo a esta parte Sevilla me ha enseñado a salir de Penitente. Nada es como antes. Hay cosas que te marcan para siempre, y esta es una de ellas, el ver desfilar a los penitentes de algunas cofradías de Sevilla, sobre todo las mas serias

En mi opinión lo primero que debemos dejar claro es que la estación de penitencia para un cofrade empieza y termina en tu domicilio particular, desde el mismo momento que te pones la túnica ya debe de comportarte siguiendo las reglas establecidas por la Hermandad. Así es en Sevilla, y yo me he fijado en esa forma de vestir la túnica. Sales de tu casa y te dirijes a la iglesia por el camino más corto, con el antifaz puesto en todo momento y en completo silencio, está prohibido hablar por la calle. 

Aunque parezca extraño desde mi experiencia personal ese camino desde tu casa a la cofradía , sirve para interiorizar tus sentimientos, para ser consciente del acto que vas a realizar, para profundizar en tu sentimiento religioso que se engrandecerá cuando llegas al interior del templo y contemplas a tus titulares preparados para la salida procesional. 

El grado de recogimiento de los hermanos , el silencio y la rutina de la disciplina antes de la salida te marcan y te predisponen para el acto penitencial que vas a realizar. Pongo como ejemplo los momentos previos que podemos vivir los hermanos de las Cofradías del Cristo del Consuelo y del Stmo Cristo del Sepulcro en ambas de sus salidas procesionales.

Otro de los detalles que pueden pasar desapercibidos y que me han llamado la atención son las normas de obligado cumplimiento durante la procesión, está prohibido hablar, volver la cabeza hacia atrás y por supuesto cambiarse de lugar en la fila o abandonar el cortejo, solamente por causas de fuerza mayor y con permiso de los diputados puede un nazareno hacer algo que no se recoja en las reglas o en el reglamento de régimen interno.

Y para concluir, la estación de penitencia para un nazareno no termina cuando los pasos entran en el templo, aún queda el camino de vuelta a casa que deberá hacerse exactamente igual que el de ida. El acto penitencial concluye cuando en el interior de tu domicilo te quitas la túnica y dejas de ser una persona anónima.

SMCE

Os dejo el ejemplo de las normas para los nazarenos de la Cofradía de La Amargura de Sevilla:

Haz clic en el Decálogo del nazareno de la Amargura




Existe una Semana Santa paralela para muchos cofrades. Una semana que obedece a un canon de belleza indeterminado que te permite viven...


Existe una Semana Santa paralela para muchos cofrades. Una semana que obedece a un canon de belleza indeterminado que te permite vivenciar lo que en nuestras calles acontece, de la mano de todos aquellos que hacen que esta manifestación pueda ser considerada un bello ejemplo de vida cristiana en comunidad.

La Semana de Pasión en nuestro pueblo no es de nadie, es de todos; del foráneo que pisa por primera vez nuestras calles. Del padre emocionado porque su hijo sale por primera vez de nazareno en su cofradía de toda la vida. Del amigo que sufre, del hermano que demanda tu atención, de la madre que pide salud para su marido enfermo, etc.

Esta ‘Semana de los encuentros’ en la que te encuentras con gente que sólo la ves de año en año por Semana Santa, no entiende de previsiones meteorológicas, de horarios e itinerarios, de manifestaciones impropias o de intereses creados. A la luz de la amistad, del encuentro improvisado o de la mirada cómplice, todo lo que nos rodea parece resplandecer con más fuerza. No queremos estar solos, necesitamos compartir lo que sentimos: “¡Qué bonita va! ¿Has escuchado la marcha que le han tocado por…? ¿Qué te parece el nuevo…?” Verbalizar nuestras emociones hace que nuestros sentimientos encuentren cabida en el lugar más recóndito y olvidado de nuestros corazones.

Qué bello es compartir, ¿no os parece? Perderse entre la gente y reencontrarse. Hacer un alto en el camino y conversar. Poner punto y seguido a cada jornada entre risas y enriquecedoras tertulias de barras de bar.

Cofrades, volvamos a echarnos a las calles. Regresemos al lugar de siempre, el que sólo nosotros sabemos. No perdamos la esperanza de seguir soñando con lo que más nos gusta, !ya sólo quedan  3 días para Domingo de Ramos!.

SMCE

La Semana Santa es el libro de nuestra vida. Marca nuestra existencia. Vivimos por y para ella.  Los nuestros siempre vuelven a estar co...

La Semana Santa es el libro de nuestra vida. Marca nuestra existencia. Vivimos por y para ella. 
Los nuestros siempre vuelven a estar con nosotros en Semana Santa.



Fotografía: Nazarenos de la Real e Ilustre Hermandad Sacramental del Stmo Cristo del Consuelo, Daimiel.

Nazareno "Colorao" de Daimiel En más de una ocasión me he referido en este blog como defensor a ultranza del nazareno, p...


Nazareno "Colorao" de Daimiel
En más de una ocasión me he referido en este blog como defensor a ultranza del nazareno, pues entiendo que es el alma y la razón de ser de la Semana Santa de Daimiel.

El hermano de número, ese que tú conoces de vista de la hermandad pero desconoces su nombre, ese que lo ves algún día de Septenario o de Triduo sentado en el último banco de la Iglesia, ese que es fiel a su cofradía en la que un Jueves o Viernes Santo, ocupa su lugar con un cirio o Cruz en las manos en la fila sin prebendas ni reconocimiento alguno, ese nazareno es el que hace posible la celebración de nuestra Semana Santa.

Pero también es a este nazareno a quien en la actualidad tiene que ir dirigida toda nuestra atención, todo nuestro calor, para formarlo y enseñarle el verdadero sentido de la estación de penitencia o de vestir la túnica.

Pero junto a este respeto al nazareno surge en mi interior una profunda preocupación sobre lo que estamos transmitiendo a nuestros hijos, pues les podremos instruir y enseñar todos los secretos de nuestra Semana Santa, pero de nada nos servirá si no somos capaces de transmitirles su auténtico y verdadero sentido; si nos quedamos en los externo y festivo de nuestra celebración, sin penetrar en el interior de cada uno de nosotros, es decir, en el sentimiento religioso.

A veces nuestra Semana Santa es una mezcla de ambas cosas, en ella caben y conviven perfectamente las dos, la fiesta, el reencuentro con familiares, amigos, etc;  y la fe. Una no tiene por qué excluir a la otra. La Semana Santa no es triste, es seria, pero a pesar de ello es total y absolutamente imprescindible que se anteponga la fe a lo festivo..