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La Real Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén y María Santísima del Amor tiene su sede canónica en la Parroquia de San Nicolás de B...

La Real Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén y María Santísima del Amor tiene su sede canónica en la Parroquia de San Nicolás de Bari de la ciudad de Úbeda. Tiene sus capillas en el templo de la Santísima Trinidad, donde se exponen al culto público las sagradas imágenes de Jesús a lomos de un Borriquillo y María Santísima del Amor.
Fotos SMCE
Una de las obras maestras de Francisco Palma Burgos, su propia Borriquita y el trono creado para la misma
Perteneciente a la Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y María Santísima de los Dolores.

La Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída y María Santísima de la Amargura de Úbeda celebró este sábado el Traslado Extraordinario c...

La Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída y María Santísima de la Amargura de Úbeda celebró este sábado el Traslado Extraordinario con motivo del 75 aniversario de la Bendición de Jesús de la Caída. La Hermandad puso su cruz de guía en la calle a las 20:30h previa celebración de la Fiesta Religiosa que congregó a la Coral Ubetense y a la Sociedad Filarmónica Nuestra Señora de Gracia, la cual tuvo el honor de acompañar, también, a la Imagen de Mariano Benlliure durante el Solemne Traslado Extraordinario.

EL Cristo de la Caída fue llevado por portadores en sus nuevas andas y por todas las personas que desearon llevarlo a través del recorrido, conformando una hermosa noche de cofradías para la historia de Úbeda.

La Imagen del Cristo de la Caída de Mariano Benlliure fue realizada en 1942 y representa a Jesús Caído desnudo (aunque en ocasiones viste túnica morada, roja o blanca) sobre unas rocas. Muestra una mirada perdida de rostro sereno con la cabeza ligeramente girada hacia el lado derecho antes del momento de la crucifixión.

La talla fue erigida en contraposición de los Cristos Caídos tradicionales que mostraban la violencia de las fuertes caídas que sufrió Jesús de Nazaret, buscando el equilibrio de la Imagen que, con la mano derecha, consigue compensar el peso de la cruz sobre el hombro izquierdo.