Hay un dicho por ahí que dice, que visto un león, están vistos todos y vista una oveja, todas; pero visto un hombre, no está visto sino uno, y aun ese, no bien conocido. Bien surtida de variedad está la especie, con infinidad de caracteres y conductas y con infinidad de caras. La cuestión está en si hay o no correspondencia entre el rostro de cada uno y su manera de ser y de comportarse. Yo creo que sí. Si es verdad que la cara es el espejo del alma.
SMCE
0 comentarios: