Este popular refrán español le viene de manera adecuada como titular para las fotos que acompañan este artículo.
Lo de restaurar imágenes, hacer nuevos enseres y demás necesidades que tiene una hermandad siempre suponen un gasto extra de dinero y en los tiempos que corren de crisis económica para las cofradías por la no realización de las procesiones de semana santa la entrada de ingresos se ha visto mermada considerablemente.
En muchos lugares las hermandades no disponen de subvenciones de ayuntamientos ni de Consejos de Cofradías, así que hay que agudizar el ingenio para obtener recursos alternativos, pero en el caso que nos ocupa no se han ido por las ramas, en el mismo altar donde recibe culto la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la localidad murciana de Águilas han colocado el cartel informativo y el cepillo, de manera que cuando el devoto vaya a rezar no se le olvide dar su contribución en forma de óbolo o ingreso en cuenta bancaria. En otros lugares hemos contemplado casos similares pero no de forma tan directa y clara, es que hasta te ponen lo que cuesta la restauración, a eso se le llama transparencia.
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