Las cofradías están cargadas de historia, de esencia, de cultura y de tradiciones del pasado. Pocas, muy pocas instituciones en muchas ciudades, pueden decir que han ido sobreviviendo a través de los siglos, actualizándose y transformándose para cada momento histórico que tocaba vivir. Se trata de una de las aristas que hacen grandes a estas corporaciones que, con sus luces y con sus sombras, van atravesando los tiempos y parecen no tener fin. Afortunadamente, hasta hoy.

En cuanto a las luces y sombras, quizá nos detenemos en demasiadas ocasiones en las miserias, que también las cofradías las tienen porque están formadas por personas Nos encanta una polémica, una cofradía que cambia de banda, una banda que ha dejado de pitar lo bien que lo hacía en el pasado, un proceso electoral en tal o cual hermandad en la que parece no presentarse ni El Tato.

Sin embargo, lo que hoy traigo a esta entrada es lo verdaderamente importante de todo esto de las cofradías. Y no se trata de estrenar por estrenar, sino de reflejar los desvelos, los esfuerzos, las horas de trabajo para lograr que un sueño se cumpla. Que tu Virgen tenga un buen manto o que tu Cristo estrene una túnica nueva.

Todo esto si que forma parte del común denominador de las cofradías. Y además se trata de logros que, desde que estas instituciones existen, siempre han estado aportando vida. 

Las cofradías son también grandeza. Grandes estas instituciones y grandes deben ser quienes las forman y gobiernan. Luchando cada día por engrandecerlas a pesar de que estemos o no de acuerdo con la actual junta de gobierno y las ansias de la Iglesia por controlarlas.

SMCE

Una de las fotos que se pueden ver en la presentación

Fotografías tomadas en Sevilla durante la Semana Santa de 2016

Como siempre puntual a su cita con los sevillanos el primer fin de semana de enero; el besapie del Señor de Pasión.

Fotos Alfonso Garcia

Unas galletas caseras para sus Majestades los Reyes Magos.
Foto SMCE

Recién estrenado el año y lo primero que quiero es desearos a todos un buen 2019 cargado de éxitos y sobre todo con mucha salud ya que sin ella nada tiene sentido. Ya hemos pasado la segunda gran noche de estas navidades y todas nuestras miradas se hacen niñas, los ojos se clavan en el cielo en busca de la estrella de la Ilusión que traerán a los Reyes Magos a nuestras ciudades.

Llegó el día de los nervios, de la fantasía, de la continua espera, de no saber qué hacer, si querer que llegue la cabalgata o querer que pase rápido para volvernos a acostar. Otro año más nuestras calles serán un hervidero de ilusiones a la espera de ver a SSMM los Reyes Magos.

Nuestros hijos perderán hasta el hambre por la impaciencia de salir en su busca por avenidas y Plazas. Hoy es el día en que todos salimos al encuentro de Melchor, Gaspar y Baltasar con alma de niños para aclamarles como se merecen. 

Hoy de la única lluvia que quiero hablar es de la lluvia de almíbar en forma de caramelos, los paraguas hoy se llaman recogeaguas se utilizan en sentido inverso para llenar nuestras alforjas y el lumbago o la ciática se cura inmediatamente y nos agachamos al suelo como un mono en busca de nuestro caramelo. 

Los escaparates de las Confiterías se llenarán de roscones de Reyes y poco a poco veremos irse la comitiva. Llegaremos a casa, cortaremos el rosco, dejaremos agua y galletas para los camellos e inmediatamente a la cama para dejar que sus majestades hagan lo propio.

!Que os traigan muchas cosas los Reyes!

SMCE

A 100 días del Domingo de Ramos. El 14 de abril será Domingo de Ramos. 

Son tan sólo 100 días lo que separan este jueves, 3 de enero, al Domingo de Ramos. La espera vuelve a acortarse, dando paso a los días más intensos del año en Sevilla, en la preparación para el día más esperado.

El Domingo de Ramos será el 14 de abril, una Semana Santa más tardía. Cuando estamos en las vísperas de la llegada de los Reyes Magos, de la festividad de la Epifanía, ya se empieza a acelerar el pulso con la cercanía de su fiesta más deseada.

Foto SMCE

En el diccionario de la RAE la definición de pertiguero es la de ministro secular que en las iglesias catedrales asiste acompañando a los que ofician en el altar, coro, púlpito y otros ministerios llevando en la mano una pértiga o vara larga guarnecida de plata.

En las procesiones religiosas se le llama pertiguero al acólito principal que porta una pértiga mediante la cual golpeando el suelo dirige y ordena las actuaciones del resto de los acólitos, lleven ciriales, navetas o incensarios.

Hasta aquí lo que nos dicen los textos, después viéndolos en la calle vemos que la realidad varía sustancialmente en muchos aspectos. Por ejemplo en medio de una bulla de cangrejeros delante del paso se convierte en el primer “antidisturbios” para abrir camino y pueda andar la cofradía. Otras veces el pertiguero es un relaciones públicas que va saludando a todos sus conocidos y presumiendo con el modelito. Y esa es otra, las vestimentas que para esto tampoco existe un canon predeterminado y viendo el reportaje gráfico que acompaña este artículo nos damos una idea de que este campo está abierto a todo tipo de indumentarias, unas más acertadas que otras, más o menos elegantes, rimbombantes, petulantes o muy sencillas según la idiosincrasia de la Hermandad y del lugar a que pertenecen.

También observamos ligeras variantes en la pértiga o vara de plata, existen de todos los tamaños, formatos y materiales, algunas parecen bastones de mando de ejércitos o majorettes, osea para gusto los colores que también en este apartado la variedad es amplia y no siempre tiene que ver con los colores propios de la Hermandad.

Para terminar, añadir que en el reportaje fotográfico aparecen pertigueros de Hermandades y Cofradías de las provincias de Sevilla, Málaga, Cádiz, Córdoba y Huelva.

Fotos y texto: Alfonso García.

A lo largo de tu vida te encontrarás con diferentes tipos de amistades. Algunas tratarán de utilizarte. Otras te pondrán a prueba. Otras más te enseñarán valiosas lecciones. Y sólo unas cuantas se quedarán contigo. Pero las amistades más valiosas e importantes, son las que sacan lo mejor de ti, las que te aceptan y te aman a pesar de todo; las que te recuerdan que vivir vale la pena. Y es que las verdaderas amistades son como las estrellas, algunas veces no podrás verlas, pero siempre estarán ahí para ti en los momentos más oscuros.

— Tony E. A. Las Verdaderas Amistades.

Foto SMCE

Fotos Alfonso García

Fotos Alfonso García

Al día de Año Nuevo le pasa lo mismo que al rey Gaspar. En su sector, el de festividades navideñas, el 1 de enero es el sobrante, el despojo que nadie valora.

Con el paso del tiempo, el Año Nuevo se ha convertido en el día de la resaca, una jornada infernal peor que cualquier domingo, ya que es el único día del año en el que, después de salir por ahí hasta las mil o de quedarte bebiendo copas en casa con la familia, tienes que levantarte a comer.

Nochebuena y Navidad son los de la zambomba, intocables, Noche Vieja la fiesta por excelencia y Reyes el día de los regalos. ¿Pero qué pasa con el 1 de enero? ¡Es el primer día del año! Y encima este año cae en Lunes.

Además, por si el pobre no tuviese ya bastante con el desprecio colectivo, su mala fama se ve agrandada con los malditos mensajes genéricos que no hemos podido leer el día anterior por la saturación de las líneas. WhatsApp que se repiten cada año, textos angustiosos (algunos mas que otros) y para todos los gustos.

Ya me he acostumbrado a recibir multitud de mensajes de estos todos los años, (este año menos que el año pasado) al igual que supongo que el remitente estará cansado de recibir un “jajajjaja, Feliz Año para ti también”, pero lo que realmente me saca de mis casillas es que aún haya gente que se sorprenda y me diga: “Me han enviado un mensaje… mira, mira”. Dios, ¡podría recitárselo entero de memoria!

En fin, supongo que las navidades es lo que tienen y hay que aceptarlo con deportividad. Nunca llueve a gusto de todos y para gustos, colores.

PD: El concierto de Año Nuevo en Viena tampoco ayuda.

PD2: FELIZ AÑO A TODOS.

Foto SMCE