Ultimando las túnicas

Si en las hermandades es ya frenético el movimiento de trabajo para ir ultimando los preparativos para la salida procesional, ni que decir en las casas de los hermanos nazarenos, donde primero hay que probarse las túnicas por si hay que hacer algún arreglito, sobre todo a los chiquillos que crecen de un año para otro. Después hay que plancharlas para dejarlas en perfecto estado para el día que toque la penitencia.