No hay niño que, con un belén a su alcance, no insista en cubrirlo todo de copitos de corcho o de sal gorda, y hablo con conocimiento de causa. No importa que esto sea Palestina, que veamos camellos a lo lejos y que, alrededor del pesebre, hayamos enclaustrado unas cuantas palmeras.

De mayores, seguiremos con el mismo ritual. Para quienes apenas catamos nieve el elemento guarda una condición mágica. Y, frente a las bolsitas de musgo, bolas de Navidad y demás tiestos, me pregunto algo que jamás se habrán preguntando mis antepasados: ¿la nieve será algo reconocible y común cuando mi hijo sea mayor? Puede que, para entonces, se haya convertido realmente en un milagro, como los ángeles del cielo. O que las estrellas sean algo tan alucinante como contemplar el estallido de una supernova: la luz artificial crece en el planeta a un ritmo de un 2% por año. Parece que también estamos perdiendo la noche.

Foto SMCE

Fotos del Belén de la Hermandad del Amor de Sevilla realizado con las imágenes secundarias del misterio de "La Borriquita" perteneciente a la misma hermandad. Fotos Alfonso García

Fotos: Alfonso García

Imágenes del tradicional Belén que todas las Navidades se monta en el Santuario Marismeño de "El Rocío" ha tenido como responsable en esta edición, a la Hermandad Sacramental de Almonte, habiendo sido realizado con las imágenes secundarias del Paso de Misterio de "La Borriquita" de dicha Hermandad, todo ello bajo la dirección de D. Guzmán Blanco Cabrera y la colaboración de numerosos colaboradores.

LAS IMÁGENES SON OBRA DEL ESCULTOR MIGUEL ANGEL VALVERDE EN 2008.

Fotos Alfonso García